LA OPOSICIÓN ANTIPATRIOTA CON COLOMBIA

En el más reciente delicado episodio de las tensas relaciones binacionales entre Venezuela y Colombia y como era fácil imaginarse, la oposición venezolana, Fedecámaras y la prensa privada respaldaron inmediatamente las temerarias afirmaciones del vecino país sobre la supuesta presencia de campamentos de las Farc en Venezuela y desconocieron la respuesta ofrecida por el gobierno venezolano ante esta nueva crisis diplomática.

Los dirigentes y partidos de oposición, como es su costumbre, salen inmediatamente a hacerle el coro a todo lo que ataque al Presidente Hugo Chávez y, en efecto, a través de la Mesa de la Ultra Derecha (MUD), consideraron como irresponsable el manejo de la política exterior de nuestro país. Los opositores respaldan la tesis de la violación de nuestra soberanía, como cuando Colombia bombardeó el territorio ecuatoriano sin permiso ni conocimiento de las autoridades de Quito. Los antipatriotas venezolanos avalan la presencia de una comisión internacional favorable a los intereses de Colombia y Estados Unidos; es decir, que venga a dar una conclusión sesgada de que, para ellos, sería cierto que Venezuela es un santuario para terroristas y que somos un estado forajido que ataca a la democracia neogranadina.

Los antipatriotas juegan cartas duras en contra de su propio país. Por un lado aplauden las intromisiones del Senado de Chile sobre nuestros asuntos internos, hacen lobby en Washington para una eventual intervención armada desde Colombia o desde Costa Rica, se reúnen con dirigentes de la derecha española (el Partido Popular de José María Aznar y de Mariano Rajoy) y los gobernadores de Zulia, Pablo Pérez, y de Táchira, César Pérez Vivas, apoyan la desestabilización aprovechando la condición de estados venezolanos fronterizos con Colombia. Una vez más, la oposición criolla está divorciada de los intereses supremos nacionales y enfila sus baterías para permitir una violación de nuestro territorio.

Medios como El Nacional y Globovisión y los empresarios agrupados en Fedecámaras han desvirtuado las advertencias del Ejecutivo Nacional sobre un magnicidio y hasta las han ridiculizado. Claro, ese es el trabajo sucio de estos laboratorios de guerra. No obstante, el pueblo venezolano está consciente y alerta en defensa de su Presidente, de su Revolución y de los logros sociales. El pueblo está consciente de que derrotará la contrarrevolución en las elecciones parlamentarias del próximo 26 de septiembre y no permitirá que la ultra derecha llegue a un foro tan importante como la Asamblea Nacional, donde se hacen las leyes del pueblo. No hay que llamarse a engaños y no caer en esta posible cortina de humo. Debemos profundizar la revolución y los comicios legislativos son vitales. No lo olvidemos.