EL CIRCO DE LA CAMPAÑA OPOSICIONISTA

Año tras año, y debido a la falta de credibilidad del pueblo y de solidez de argumentos, la oposición venezolana en cada proceso electoral debe apelar a la maquinaria mediática con la que cuenta para tratar de poner a la opinión pública a su favor. Claro, todo esto con poderosos aliados en los sectores privados del país y en el extranjero que aportan millonarias sumas de dinero para el montaje de laboratorios de guerra sucia que sustentan su estrategia en la desinformación y contrainformación sistemáticamente difundidas por medios de comunicación al servicio de la extrema derecha y de la burguesía.

Así, hemos sido testigos y víctimas de la incertidumbre en torno a la matriz informativa de desabastecimiento, prefabricada en cada proceso electoral y usada como punta de lanza, para meternos, casi de forma intravenosa, que el Gobierno Nacional genera caos y crisis alimentarios, como si olvidáramos que fueron ellos quienes dejaron sin alimentos al pueblo durante el paro patronal del 2002.

Ahora bien, existe MERCAL y otras iniciativas gubernamentales y ya no dependemos de los productos del sector privado para garantizar una buena alimentación, así que en esta oportunidad necesitarán mentiras más engañosas. De esta manera entraron en materia unos días antes de comenzar la campaña para arremeter con el tema de la inseguridad, todo esto muy bien condimentado con matrices de opinión internacionales dirigidas por el New York Times y CNN en español, así como una extensa lista de medios de comunicación en distintos países del mundo influenciados a su vez por las transnacionales de la información: agencias de noticias como las estadounidenses AP(Asociated Express) y la UPI(United Press International), la británica REUTERS y la española EFE entre otras, que siguen el guión dictado desde Washintong en contra de Venezuela y de la Revolución Bolivariana.

En este clima se inicia la campaña electoral el pasado 25 de agosto y el PSUV demuestra toda la fuerza popular que lo acompaña, apoyándose en una convincente campaña basada en un contacto directo con los ciudadanos, incluyendo visitas casa por casa con la intención de convertir a Venezuela en un Pueblo Legislador. Sin embargo, siguen pasando los días y la derecha no muestra, no involucra, no convence a nadie. Los pocos que salen a la palestra dan risa. El más notorio, Gustavo Rojas candidato al circuito 5 de Caracas por Primero Justicia, quien ha aparecido en la contienda política con una rifa de mamoplastia para las mujeres de La Vega, según él, para financiar su campaña. Es sabido que Primero Justicia tiene quien lo financie en el exterior, y que incluso, el partido recibió una gran cantidad de dinero por parte de la mamá de Leopoldito, quien para ese entonces, estaba bien ubicada en la vieja PDVSA, así que platica no les debe faltar.

Es deplorable que este triste payaso, confunda a nuestro pueblo con el de la IV República, al que le llevaban una bolsita de comida para que votara por AD o COPEI. No entienden estos politiqueros que hoy tenemos un pueblo consciente, que sabe el momento histórico que vive y construye, además que las muchachas de La Vega no saldrán de abajo con una operación de senos.

La misma pena pasó María Corina Machado, quien al mejor estilo de la Cuarta, intentó colearse en el simulacro de votación organizado por el CNE en el liceo Gustavo Herrera y fue abucheada inmediatamente.

El circo de payasos devaluados de los oposicionistas ha vuelto a fallar, porque ya es evidente su pobre capacidad de movilización y de convencimiento, definitivamente tendrán que ir con su circo a otra parte, a los pocos municipios y disociados que aun controlan, pero donde cada vez son menos sus espectadores.