LA NOVELA MEDIÁTICA DE LA OPOSICIÓN: UN APLASTANTE TRIUNFO ANTE EL PSUV

Una de las grandes trampas ideológicas de la actualidad, es la manipulación de las informaciones por parte de los mass media que están al servicio de la extrema derecha a nivel mundial. En Venezuela los medios de comunicación privados totalmente en línea con estas inclinaciones, han llegado al punto de transfigurar la realidad.

El cinismo mediático se ve reforzado por la clásica tesis de que “una mentira repetida cien veces se convierte en verdad”, porque a pesar de que hay una masa ingenua que se cree estas historias, también existe otra que sabe a conciencia que están mintiendo descaradamente y se dedica difundir estas falsedades para darle credibilidad colectiva, el problema es que ya este pueblo no es tan pendejo como era antes sobre todo en cuestiones de política.

Los datos indicados en el Primer Boletín del CNE a las 2 am del día 27 de septiembre, que reflejan una tendencia irreversible fueron claros. Ahora resulta que los 98 escaños logrados por el PSUV, ante los 63 alcanzados por el oposicionismo, incluyendo 2 del PPT y 7 por definir, de un total 165 que estaban el juego el pasado domingo 26 de septiembre, reflejan la victoria de la MUD y restantes partidos.

El tratar de desconocer la condición de primera fuerza política del PSUV y de colocar a la MUD en la cima del parlamento de la noche a la mañana, únicamente por unos escaños recién adquiridos en una jornada electoral como la del 26 S, en la que el partido de gobierno volvió a demostrar la solidez de su supremacía en los sectores populares de la población que constituyen la inmensa mayoría del país, además de ganar en casi todos los estados del territorio nacional, es una demostración del delirio de grandeza y del triunfalismo que se ha apoderado de los factores oposicionistas.

En los sectores chavistas se piensa inclusive en quiénes podrían saltar la talanquera y poner sus curules al servicio del oposicionismo, es una posibilidad que está siempre latente y que ya se ha presentado en tiempos de la Revolución Bolivariana. Hay quien vaya todavía más lejos y considere que se pueda intentar comprar con financiamiento foráneo, a uno o varios diputados del peseuvismo, la ultraderecha es capaz de cualquier estratagema. Los dólares de la CIA aparecen siempre que es necesario desestabilizar a un gobierno no manipulable por Gringoland.

¿Dónde está la aplastante victoria de la oposición?, ¿cuáles son las cifras que colocan al oposicionismo como factor preponderante de decisión en el nuevo parlamento?. El PSUV, no obtuvo la mayoría calificada a la que aspiraba para dar continuidad absoluta al proyecto de país revolucionario, bolivariano y socialista que representa. Los 110 escaños que requería el partido de gobierno y que significaban las 2/3 partes de los 165 escaños de la Asamblea Nacional(AN) ya no serán posibles, lo cual implica sentarse a negociar con la oposición en lo que respecta a la aprobación de leyes orgánicas y nombramientos de cargos para los poderes públicos. Sin embargo, los supuestamente todopoderosos señores de la MUD y compañía no pueden llegar a la AN arrasando con todo porque obviamente no son mayoría y no pueden legislar como los “amos del valle”, tienen que entenderse con la gente del PSUV.

El problema para el PSUV no sólo está en negociar, es imprescindible un mínimo de tolerancia ante muchos colegas difíciles de soportar por los intereses oscuros que éstos representan, anteponiendo los verdaderos intereses del país y sin bajar la guardia en la defensa de las reivindicaciones sociales logradas en los 11 años de Revolución liderada por el presidente Chávez, cuyas políticas aún por afinarse ya empiezan a arrojar resultados. No se puede convertir a la Asamblea Nacional en un patio de gallos de pelea, donde el enfrentamiento es a muerte.

¿Qué va a negociar el PSUV?

1.- La posibilidad de concederle poderes especiales al Presidente de la República si éste llegara a solicitar ante la Asamblea Nacional la aprobación de una Ley Habilitante.

2.- La aprobación de leyes con carácter orgánico.

3.- El nombramiento de los titulares de los poderes Judicial, Electoral y Ciudadano(Magistrados del Tribunal Supremo de Justicia, Fiscal General de la República, Contralor General de la Nación, Defensor del Pueblo, entre otros).

Es obvio, no obstante, que a pesar de las exigencias de la convivencia legislativa, que el PSUV no va a renunciar en ningún momento a su condición de partido mayoritario dentro del parlamento, solamente en la ficción recreada de una novela mediática, el oposicionismo es dueño y señor del recién elegido parlamento.