martes, 9 de noviembre de 2010

PUBLICIDAD, CANALLA MEDIÁTICA Y ESTAFADORES INMOBILIARIOS

Como ha pasado a lo largo de la Revolución Socialista Bolivariana, a las empresas privadas con fines de lucro dedicadas al ramo de la comunicación social (léase radio, prensa, televisión y portales web) les parece mal todo lo que hace el Gobierno y ahora han enfilado sus baterías contra las medidas tomadas para preservar el derecho de los ciudadanos a tener techo propio y que han sido estafados por muchas empresas constructoras e inmobiliarias.

Con Globovisión, Unión Radio y El Nacional a la cabeza, la canalla mediática, que dirige sus mensajes para provocar disociación psicótica en la población, defiende a ultranza a los ladrones de cuello blanco que prometieron unidades habitacionales a corto plazo pero que, llegado el tiempo previsto para la entrega de los inmuebles, salen después con la excusa ramplona de que deben seguir buscando recursos económicos para terminar el proyecto porque el “rrrrrégimen” tiene controlado el cemento, los bloques y las cabillas.

Estos “señores”, por así llamarlos decentemente, aparte de incumplir con los lapsos de entrega, han vendido el mismo apartamento a dos personas distintas, obligado a los compradores a pagar elevadas iniciales, cuotas especiales y mensualidades indexadas, han aumentado el valor de la vivienda y han obligado a los agraviados a pagar el denominado Índice de Precios al Consumidor, so pena de retirarlos como dueños del bien inmueble con el agravante de quitarles más dinero con la llamada “penalización”.

Ante esta serie de irregularidades, el Presidente Hugo Chávez, como ya es sabido, anunció la expropiación de varios proyectos inmobiliarios y prometió entregar las casas y apartamentos a los compradores iniciales que demuestren, documentos en mano, ser dueños de esas viviendas. Previo al anuncio, el mandatario había declarado la emergencia habitacional y destinó BsF. 6450 millones para desarrollar el Plan de Emergencia de Vivienda.

Todas estas acciones gubernamentales fueron mal vistas por los medios privados, pues se trata de constructoras que pautan su publicidad engañosa en las radios, televisoras y periódicos de la burguesía que para nada les importa el bienestar del pueblo. Es más, los mismos medios han desarrollado una intensa campaña de tergiversación y hasta han llevado a los afectados a estar de lado de quien los roba, de quien les ha negado su acceso a la vivienda.

Por si esto fuera poco, el Secretario General de Acción Democrática, Henry Ramos Allup, llamó “lambucios” a quienes están reclamando sus derechos y algunos de la “clase media” hasta han aplaudido este discurso de los medios y los políticos oposicionistas. Cabe destacar que entre los constructores estafadores está Domingo Plaz Castillo, hermano de Alejandro Plaz Castillo, cofundador junto con la barbie diputada electa María Corina Machado, de la empresa privada Súmate, que quería erigirse como especie de un CNE paralelo para desconocer resultados electorales que favorecieran a los candidatos revolucionarios.

Pues bien, para poner coto a la situación, el Presidente Chávez decidió intervenir directamente y activó una Sala Situacional Habitacional en el propio Palacio de Miraflores y el Indepabis (Instituto para la Defensa de las Personas en el Acceso a Bienes y Servicios) está siguiendo también muy de cerca cada denuncia formulada por los afectados.

Al respecto, el mandatario nacional en sus “Líneas de Chávez”, publicadas este domingo 07/11/2010, enfatizó que “hemos decidido acabar (y nuestra decisión es inexorable) con esa modalidad de la delincuencia organizada que es la estafa inmobiliaria: no va a haber ninguna clase de contemplaciones con los cárteles inmobiliarios, verdaderas mafias operando a la luz del día, que han esquilmado los ahorros de miles de venezolanos y venezolanas de clase media. Se terminó el tiempo de los engaños y los contratos leoninos: aquí existe un Estado dispuesto a proteger los derechos y los intereses de las víctimas de estos choros de cuello blanco; a restituirle a nuestros compatriotas lo que les pertenece y les ha costado tanto esfuerzo y tanto sacrificio”.

El Presidente le ha pedido a la clase media, la principal afectada con el citado modus operandi, que confíe firme y decididamente en el Gobierno, pues “está actuando con la misma energía y la misma resolución que demostramos al eliminar los siniestros créditos indexados y las perversas cuotas balón hace cinco años”.

Con la actual situación en materia de vivienda, se hace un clamor popular la aprobación por parte de la Asamblea Nacional de la Ley del Mercado Inmobiliario, que se sumaría a otro instrumento liberador que es la Ley de Protección al Deudor Hipotecario.

El mensaje firme y sin vacilaciones es a la clase media: Cuenten que el Ejecutivo está actuando para proteger a la familia y garantizar así su derecho a un techo por el cual han trabajado y ahorrado con tesón, incluso en muchos años de vida.

Como bien lo aseveró el Presidente Chávez: “nuestro Gobierno está dando la cara en defensa de tus legítimos intereses (…) con tu derecho a la propiedad estamos absolutamente resteados”. Y es así, no debe haber dudas.

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