CHÁVEZ: LA REAFIRMACIÓN DE UN LIDERAZGO

“Nunca nosotros podemos permitir que la contrarrevolución tenga más poder que la revolución”

Hugo Rafael Chávez Frías

Los “grandes hombres se crecen ante las dificultades” y el presidente Chávez ha sido una viva ejemplicación de esta máxima popular, precisamente por su decisiva y estratégica actitud ante la problemática causada por el prolongado periodo de precipitaciones que ha afectado al país en los últimos tres meses del año 2010 y ha dejado como secuela más de 100 mil ciudadanos sin hogar en todo el territorio nacional.

En la historia contemporánea de la nación, ningún Jefe de Estado venezolano había recorrido los sectores afectados por las lluvias, especialmente los barrios como lo ha hecho el presidente Chávez, donde lejos de ser rechazado por el estrés social generado por una situación de tan extrema gravedad, fue recibido con muestras de cariño por un pueblo, testigo de su preocupación para encontrar soluciones efectivas y perdurables en el tiempo, para evitar la construcción de viviendas en zonas de alto riesgo, que trae como consecuencia miles de damnificados todos los años y reubicar en unidades habitacionales dignas a los “sin techo”.

Una parte del gran conjunto de medidas tomadas por el gobierno revolucionario para resolver la actual situación de emergencia nacional planteada por la actual coyuntura climatológica, incluye la habilitación de refugios en instalaciones militares como el Fuerte Tiuna y el Cuartel San Carlos, incluso de espacios del Palacio de Miraflores y la Asamblea Nacional, sedes de instituciones gubernamentales, hoteles privados con habitaciones alquiladas por el estado, la adjudicación inmediata de apartamentos construidos dentro de los programas sociales de la Revolución Bolivariana como los 260 que se entregaron en el estado Vargas y los 160 del Complejo Habitacional “El Morro” en la Urbanización Petare, Municipio Sucre.

En paralelo con las acciones mencionadas el comandante presidente, ha definido una política de dignificación para todos los damnificados, en una incansable labor coordinada con su gabinete de ministros, Defensa Civil, los cuerpos de Bomberos, la Fuerza Armada, los Cuerpos de Seguridad del estado y entes del gobierno, que tiene como objetivo la satisfacción de sus necesidades básicas de techo, alimentación, salud, vestido y su bienestar espiritual en época navideña, con especial énfasis en la numerosa población infantil afectada.

La asignación de un Bono Navideño para las familias damnificadas por un monto equivalente al salario mínimo, el cual ya está disponible mediante la utilización de una tarjeta de débito del Banco de Venezuela, es otro de los principales beneficios para los afectados por las lluvias, ya que les permitirá cubrir gastos esenciales en fechas decembrinas, tomando en cuenta que durante su estadía en los sitios del albergue temporal no tienen que pagar renta, luz, agua, gas y alimentación.

Las decisiva intervención del presidente Chávez constituye una demostración de su amor por el pueblo y de su gran sensibilidad humanba, además de ratificar su rol protagónico como máximo conductor de las masas, una posición privilegiada que ocupa en una sociedad de gente mayoritariamente pobre, desde diciembre de 1999 cuando fue electo primer mandatario por sufragio universal.

El comandante no tiene “un pelo de pendejo”, por no decir de tonto, conoce perfectamente las herramientas comunicativas de que dispone, el potencial de su carisma personal y su don de convocatoria, que constituyen armas imprescindibles para despertar la consciencia de un pueblo en momentos de crisis y estimularlo a levantarse ante las adversidades.

Por otra parte, para un dirigente militar y ahora político acostumbrado a bregar con dificultades a lo largo de su vida como el barinés, la lucha es una constante y de manera particularmente extrema en su condición de presidente de un país anárquico y turbulento por tradición histórica, condición en la que por decirlo con brevedad y en términos bélicos ha recibido misiles de todos los frentes internos y externos.

Chávez “por ahora” o “hasta ahora” como quiera que se diga, ha sido como esos muñequitos que llaman “porfiaos”, le dan los de arriba, los de abajo, le pega la derecha o la izquierda por un lado o por otro y se vuelve a parar, es un caso muy sui géneris en el complejo juego de la geopolítica mundial. Una vez más le ha picado adelante a la oposición y sumando sus dotes personales a una infatigable capacidad de trabajo, ha dado un paso enfrente, para evitar que los escuálidos traten de rentabilizar a su favor el estado de emergencia en que se encuentra el país, con sus triquiñuelas mediáticas de costumbre.

Se puede afirmar en base al curso de los acontecimientos, que la estrategia del comandante, reafirma su liderazgo en medio de una crisis que golpea a los sectores más humildes de la población y en lugar de debilitarse políticamente o convertirse en blanco perfecto de críticas malintencionadas en una coyuntura que sería normalmente aprovechable por sus enemigos, vuelve a surgir fortalecido.

Las palabras de los técnicos de la delegación bielorrusa cuyas empresas van a construir viviendas en parte de las 40,8 hectáreas destinadas para tal fin en terrenos del Fuerte Tiuna, podrían ser un ejemplo de celeridad ante una problemática que amerita obras de acelerada ejecución: “vamos a proyectar y construir al mismo tiempo….[….]….en dos meses ud (dirigiéndose al presidente Chávez) verá resultados” (Noticiero de Venezolana de Televisión, 19/12/10).

Esperemos que haya una continuidad sostenida en los programas de construcción masiva de viviendas de interés social para que las expectativas de solución, en especial para los “sin techo” puedan ser satisfechas a corto y mediano plazo, es fundamental que los nuevos objetivos trazados se cumplan, porque el bienestar del pueblo es también el bienestar de la joven Revolución Bolivariana.